Veranillo y “na” de membrillos
Pasada la mágica noche de San Juan se inicia la soleada estación veraniega y no dejan mis ojos de mirar de reojo a esa que fuera mazmorra de penas y ficticias alegrías. La duda de saber me enerva y desearía poseer la virtud de ver quien es preso de esa casa White ahora, del motivo real que esta originando su desmembramiento y la cara del hortera que tanto me hizo sentir que yo carecía de gusto, cuando el suyo pasa por quien le acompaña y por lo muy poquito a poco que sus ojos le dejan ver y aprender.
La ruina de una crisis o el miedo a la realidad quedan lejos de una cabeza sin fuelle para ideas propias a no ser que le den un toque desde la altura de una comisión previa supervisión de quien solo es capaz de de ver, oír, sentir y pensar por el, una que debe de estar a las puertas de un infierno cuyo calor alimentan las mentiras, desdichas e irrealidades que condicionaron la vida de quien cree le pertenece y de todos los que sufrimos al tropezarnos con ella y su títere.
Parece que hicieran años … y lo único que he sacado en claro de todo esto es la ceguera hacia aquellos que provocaron este circo y que me gustaría en su debido día ver como son devorado por los leones.
Pasada la mágica noche de San Juan se inicia la soleada estación veraniega y no dejan mis ojos de mirar de reojo a esa que fuera mazmorra de penas y ficticias alegrías. La duda de saber me enerva y desearía poseer la virtud de ver quien es preso de esa casa White ahora, del motivo real que esta originando su desmembramiento y la cara del hortera que tanto me hizo sentir que yo carecía de gusto, cuando el suyo pasa por quien le acompaña y por lo muy poquito a poco que sus ojos le dejan ver y aprender.
La ruina de una crisis o el miedo a la realidad quedan lejos de una cabeza sin fuelle para ideas propias a no ser que le den un toque desde la altura de una comisión previa supervisión de quien solo es capaz de de ver, oír, sentir y pensar por el, una que debe de estar a las puertas de un infierno cuyo calor alimentan las mentiras, desdichas e irrealidades que condicionaron la vida de quien cree le pertenece y de todos los que sufrimos al tropezarnos con ella y su títere.
Parece que hicieran años … y lo único que he sacado en claro de todo esto es la ceguera hacia aquellos que provocaron este circo y que me gustaría en su debido día ver como son devorado por los leones.